Las tuberías Hobas producidas con tecnología Hobas por el método de centrifugación se fabrican utilizando fibra de vidrio, resinas termoestables ( por ejemplo, poliésteres insaturados o vinilésteres), cargas inertes y arena sílice. Las tuberías son circulares con un diámetro exterior uniforme.
Las tuberías Hobas con la tecnología Hobas se producen mediante el sistema centrifugado en un proceso controlado al 100% mediante ordenador. Los cabezales de la máquina de fabricación aportan todas las materias primas, fibra de vidrio cortada, la resina y las cargas de refuerzo, en un molde que gira a alta velocidad. Capa a capa, en un proceso predefinido, la pared de la tubería se construye desde fuera hacia dentro. Las cantidades de las materias primas se monitorizan y comparan con los valores de diseño deseados para poder garantizar la trazabilidad de cada material utilizado durante la producción. Una gran fuerza centrífuga de hasta 75 g presiona los materiales contra la pared del molde compactándose al máximo, creando una pared de tubería de gran calidad, muy sólida y libre de vacíos. Se utiliza agua para refrigerar el molde, quitando después la tubería a la cual se le corta y bisela sus extremos. Finalmente se monta un manguito de unión en el extremo de cada tubo.
El proceso de fabricación mediante centrifugación garantiza que las tuberías sean circulares, que el espesor de las paredes sea uniforme en toda su superfície del diámetro exterior y que el material disponga de una resistencia a la compresión en sentido longitudinal extraordinaria, muy importante para el sistema de hinca. Gracias a la estructura tridimensional de conexión de la resina termoestable, la tubería permanece estable incluso en ambientes muy cálidos. La construcción en sandwich de la pared asegura también que las tuberías puedan aguantar grandes cargas sin problema y permite personalizar la resistencia de la tubería para ajustarse a las necesidades específicas de las distintas direcciones de carga.